Introducción al HDR automático de Xbox Series X y Series S

Una nueva característica interesante introducida en Xbox Series X y Series S es el HDR automático, que añade alto rango dinámico a títulos que no son HDR. ¡Y funciona mejor que lo que piensas! 

Una característica importante de Xbox Series X y Series S es el HDR automático. Aunque ha llegado sin mucha fanfarria, es una incorporación realmente útil al sistema operativo, que aumenta la calidad visual de los juegos compatibles. Así pues, ¿qué hace el HDR automático y cómo funciona? 

El HDR automático hace lo que su nombre indica: añade un efecto de HDR a los juegos que carecen de metadatos HDR. Aunque las Xbox Series X y Series S implementan muy bien el HDR en juegos que tienen un alto rango dinámico integrado por los desarrolladores, la mayor parte del catálogo antiguo carece de HDR.

Esto incluye títulos originales de Xbox, Xbox 360 y Xbox One que se lanzaron antes de la generalización del HDR. Resulta que Microsoft pensó en esto y tiene un equipo dedicado a crear perfiles para juegos que carecen de HDR, con el fin de añadir el HDR automático juego a juego. Algunos títulos no quedaban afortunados, como GTA IV, con sus colores sobresaturados tras incluir el HDR automático, así que esos no lo tienen porque el equipo decidió que solo serviría para reducir la fidelidad visual.

No obstante, en general, los títulos antiguos sin HDR nativo se benefician del HDR

Por lo general, sí. Hemos experimentado con varios juegos y los que ofrecían HDR automático parecían más brillantes y contrastados. No es un cambio como el día y la noche, como pasa con el HDR real, pero si tenemos una buena pantalla con 4k, notaremos que muchos juegos se ven ahora mejor que lo que recordábamos de generaciones de consolas anteriores.

Sí. En la configuración, hay que acceder a los modos de vídeo y asegurarse de que el HDR automático esté marcado. De lo contrario, no funcionará. Aparte de eso, no se requiere la intervención del usuario. Una vez habilitado, el HDR automático funciona... automáticamente. 

Originalmente, los materiales de marketing de Microsoft daban a entender que aparecería un mensaje en la pantalla cuando se activara el HDR automático. Quizás consideraron que esto sería demasiado intrusivo, porque lo cierto es que en este momento no aparecen mensajes ni notificaciones en la pantalla. En cambio, podemos pulsar el botón de inicio/Xbox en el mando para que aparezca la información. Una vez hecho esto, los títulos compatibles con HDR automático tendrán la etiqueta adecuada junto a un icono de sol o brillo que dice “AUTO HDR”. Así es como se sabe que el título al que jugamos es compatible con el HDR automático.

Esta característica suena simple, pero en realidad no lo es, ya que el equipo técnico necesita equilibrar su algoritmo general con las peculiaridades gráficas de cada título. Debido a ello, hay juegos que no contarán con HDR automático. Aun así, aplaudimos a Microsoft por tratar de adaptarse mejor a los propietarios de pantallas complatibles con HDR de todo tipo, ya sean televisores o monitores. Y eso incluye los monitores 1440p, que son compatibles de forma nativas con las consolas Xbox.