Nacido en Francia en 1974, Guénolé Trehorel es un fotógrafo autodidacta.

Apasionado por la música, los deportes y la naturaleza, le tomó un tiempo encontrar su estilo artístico, que estaba enterrado en lo más profundo de él. Un día, miró a través de una lente DSLR y fue una epifanía. Ese momento cambió su vida. Entonces decidió dedicarse de lleno a la fotografía para desarrollar su propio universo.

Siempre en busca de nuevos desafíos, fue con la mayor felicidad que se convirtió en fotógrafo oficial de festivales de música y de ACO (Automobile Club de l'Ouest) y así cubrió las 24 horas de Le Mans durante 10 años. Guénolé disfruta resaltar la belleza de su entorno trabajando con varias oficinas de turismo en su región de residencia.

¿Cómo describe su estilo? Para Guénolé, la fotografía debe ser inmersiva, sea cual sea el tema. Debe desprender emoción. Captura el movimiento ligero y sublime mientras aprovecha los momentos especiales.

Al vivir en una de las regiones más bellas de Francia, Bretaña, es bastante natural que Guénolé se especialice en fotografía de paisajes.

Comprender las diferentes condiciones de luz, independientemente de la estación y el clima, es fundamental para magnificar estos paisajes. Según Guénolé, levantarse temprano y acostarse tarde son claves para encontrar estas condiciones de luz especiales a medida que desarrollas tu propio universo.